| ID | #1572273214 |
| Añadido | Lun, 28/10/2019 |
| Autor | July N. |
| Fuentes | Ian Shepherd, Cornish Guardian (Bodmin, England), Nov. 26, 1998
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| Fenómenos | |
| Estado | Estudio
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Datos iniciales
33 años de silencio se rompió la semana pasada, cuando el líder de la figura en cornualles, dijo públicamente cerca de colisión con el hecho de que ella y su esposo de la firme opinión de platillo volante.
Joan vicente, el presidente de la comisión de planificación del condado durante nueve años, hasta mayo del año pasado, y ahora ya hace tiempo que trabaja el asesor del condado y del distrito Рестормель, le contó que ella y su marido roy visto una misteriosa nave altas horas de la noche en 1965, en una zona rural entre santa dennis y Карфью.
Ambos siguen convencidos de que lo que habían visto, en muchos detalles, es de otro mundo.
Durante muchos años esta pregunta quedó "prácticamente el secreto de la familia", porque la pareja tenía miedo de que su высмеют, si le van a contar su historia.
"Pero ahora es mucho menos tabúes debido a la cantidad de tales observaciones", dijo la señora vincent."Ahora no hay ninguna razón para que esto permanezca en secreto".
Dijo que la tarde de 1965, ella y su marido roy pasar por la aldea de Карслэйк de camino a casa, en Стеналис.
"Sabíamos que los estudiantes de la universidad Фоуи realizaron vigilias en el actual Кэрлогас-Даунсе y que pocas veces vieron allí platillos voladores", dijo la señora vincent.
"Nos detuvimos para mirar el cielo por nosotros mismos. Nos sentamos en el coche unos 15 minutos, cuando de repente parece que se ha encendido la luz. En un minuto estaba oscuro, en la siguiente pudimos ver a muchas millas de ambiente rural. La luz era brillante y constante, no parecido a la cremallera. A unos 50 metros, en el campo de seto vivo, podríamos ver de dónde venimos.Este fue un gran objeto en forma de cúpula, que parecía como si estuviera hecho de cristal.
Por setos de que no podía ver toda la parte inferior de la cerca de la tierra, por lo que ninguno de nosotros sabía bloqueado si ella estaba de pie en la hierba.
Podemos ver el interior de la bóveda, de donde proviene la luz. Allí había grandes armarios con ruedas. Debajo de la cúpula, donde el objeto era sólido y de color gris-verde, eran ojos de buey.
Más tarde hemos evaluado que lo que pudimos ver, tenía que tener un ancho de 50 a 70 pies de largo y una altura de 30 a 40 pies, aunque no pudimos ver a la base de detrás de un seto.
Después de unos 30 segundos me dijo Рою, a mi esposo: "dios mío, dios mío, vamos, nos iremos de aquí", porque yo estaba muy sorprendido. Nos fuimos directamente a casa.
Una vez que llegamos, nos pusimos de acuerdo para ir en habitaciones separadas y dibujar lo que se ve. Cuando comparamos las imágenes, eran prácticamente idénticos.
Nosotros nunca no dijeron nada a nadie, excepto a mi madre y luego a mi hijo david, que tenía entonces cuatro años.
Mi marido tan escéptico acerca de las cosas, como platillos voladores, pero ahora ambos sabemos que no hay realmente algo para comer. Estamos encantados de que han visto que hemos hecho juntos, porque no creo que alguno de nosotros hubiera creído en la historia, si no estaba allí".
Al día siguiente, la pareja regresó al lugar del accidente, pero no encontró ninguna de las sugerencias de la observación. El campo, donde el señor y la señora vincent vieron el barco, dejó de existir hace muchos años, cuando se convirtió en el lugar de la extracción de la arcilla de los trabajos. Y el camino, en el que se detuvieron su vehículo a un extraño de la colisión, así fue desviado.
Traducido del servicio de «Yandex.Traductor»
Noticias originales
Mrs Vincent’s drawing of the unidentified object. (Cornish Guardian) ABOVE
Joan and Roy Vincent at the site of their close encounter. (Cornish Guardian)
“Councillor reveals 30-year secret of a ‘close encounter'”
by IAN SHEPHERD
A 33-year silence was broken this week when a leading figure in Cornwall spoke publicly about a close encounter with what she and her husband firmly believe was a flying saucer.
Joan Vincent, chairman of the County Planning Committee for nine years until last May and now a long-serving County and Restormel Borough Councillor, revealed that she and her husband Roy had observed the mystery craft late at night during 1965 in a then rural area between St Dennis and Carthew.
Both remain convinced that what they saw, in considerable detail, was from another world.
The matter remained “virtually a family secret” over the years because the couple feared that they would be ridiculed if they told their story.
“But it is now a much less taboo subject because of the number of such sightings,” said Mrs Vincent. “There is now no reason for it to remain a secret.”
She said that late one night in 1965, she and her husband Roy were driving past the hamlet of Karslake, deep in the china clay country, on their way home to Stenalees.
“We knew that students at Fowey College used to spend night-time vigils at what is now Caerloggas Downs and that they had reported seeing flying saucers there several times,” said Mrs Vincent.
“We stopped to have a look at the sky ourselves. We had been sitting in the car for about 15 minutes when suddenly it was as if a light had been switched on outside. One minute it was dark, the next we could see for miles over the surrounding countryside. The light was brilliant and it was constant, not like lightning. About 50 yards away, in a field behind a hedge, we could see where it appeared to be coming from. It was a large, dome-shaped object that looked as if it were made of glass. “Because of the hedge, we could not see all of its lower section closer to the ground, so neither of us know if it was hovering or resting on the grass. “We could see inside the dome, where the light was coming from. There were big cabinets with dials on them. Below the dome, where the object was solid and a grey-green colour, there were portholes. “We later estimated that what we could see must have been about 50 to 70 feet across and between 30 and 40 feet high, although we couldn’t see the base because of the hedge.
“After about 30 seconds, I said to Roy, my husband ‘My God, let’s get out of here,’ because I was quite shocked. We drove off and went straight home. “As soon as we arrived, we agreed to go into separate rooms and draw what we had seen. When we compared the drawings they were virtually identical.
“We never told anyone apart from my mother and later my son, David, who was aged four at the time.
“My husband was an absolute sceptic about such things as flying saucers but we now both know that there really is something out there. We are glad we saw what we did together, because I don’t think either of us would have believed the story if we hadn’t been there.” The couple returned to the scene the following day but could find no clues to the sighting. The field where Mr and Mrs Vincent saw the craft ceased to exist years ago when it became a spoil tip for nearby clay workings. And the road where they had stopped their car, prior to the strange encounter, has also been re-routed.
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Investigación
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