Raras auroras espirales en el cielo de Noruega

El domingo, 11 de diciembre, en la ciudad Noruega de Tromsø, se vieron raras auroras en forma de espiral.

"El cielo estaba despejado y desolado, pero de repente, de ninguna parte, aparecieron luces verdes que formaron un vórtice gigante", dijo el fotógrafo Marek Rybar.

A diferencia de otras formas de auroras, como bandas, arcos o coronas, las auroras espirales son bastante raras, y los científicos han estado discutiendo sobre las razones de su aparición durante más de medio siglo. Hasta la fecha, se sabe que en el hemisferio Norte giran en el sentido de las agujas del reloj, y en el sur, en la dirección opuesta. Sus tamaños pueden variar de 10 a más de 1000 Km.

Según una de las primeras teorías, las espirales se forman bajo la influencia de las corrientes de Birkeland que fluyen a lo largo de las líneas geomagnéticas en la atmósfera superior. La siguiente teoría relaciona su aparición con la inestabilidad de Kelvin — Helmholtz, cuando los medios de contacto se mueven a diferentes velocidades. Este mismo proceso conduce a la formación de hermosas nubes onduladas.

Un nuevo estudio publicado el otoño pasado sugiere que el giro de las auroras se debe a un tipo particular de inestabilidad del plasma que ocurre cuando los campos magnéticos se reconectan y explotan.