| ID | #1555425747 |
| Añadido | Mar, 16/04/2019 |
| Autor | July N. |
| Fuentes | Riley Martin “The Coming of Tan” quoted in Filer’s Files # 40, September 22 2004
|
| Fenómenos | |
| Estado | Estudio
|
Datos iniciales
Siete años de riley martin vio por primera vez las extrañas luces sobre el río cerca de su casa. Mientras su familia vivía cerca de la orilla occidental del río de san francisco, que es uno de los afluentes que alimentan el mississippi.
Las luces que aparecían sobre el río durante tres noches consecutivas, aproximadamente a la misma hora de la noche o temprano en la mañana, se acercaban cada seguido de la visita, y en la tercera noche de las luces brillantes eran lo suficientemente cerca de su casa, para emitir luz en las paredes de su dormitorio. En la tercera noche de riley decidió ir a investigar.
Es extraño, pero dos de sus hermanos, que vivían en la misma habitación con él, nunca aisladas, para dar testimonio de la luz. Incluso cuando se trataba de su despertar. Posiblemente, esto se hizo deliberadamente, porque habitualmente no se despierta.
Allí había cuatro de la luz, y él los miraba, fascinado por sus movimientos acrobáticos. Se movían a través del río desde el oeste y en seguida se paraban sobre el río. A continuación, lentamente, dando vueltas, siguiendo al líder. O el cuarto se quedó inmóvil, mientras que menos de tres rodearon. Después de algún tiempo, el cuarto de la luz se alejó de sus compañeros de grupo y bajaba, светясь más, al menos de los árboles junto al río. No escuchaba ni un sonido.
Las luces cambiaban a menudo el color y la intensidad del amarillo al blanco, rojo, verde y tonos de azul. En la tercera noche de las luces estaban muy cerca, y parecía que se posó detrás de los árboles a menos de un cuarto de milla de su casa. Se puso la chaqueta y salió. Acompañado por su fiel y valiente perro mezclado de la raza brown Combate. Pronto llegaron a un lugar donde aterrizó la nave. Entrando en los arbustos, vio un platillo, y estaba en el prado, suspendida a una altura de unos doce pies sobre la tierra, y, aunque se acoge a tres patas flexibles, que lentamente танцевало, como un tapón, se mueve con el agua.
Pronto el barco empezaba a palpitar розоватым, y riley ha descubierto que se centra en el haz de luz que emanan del vehículo. De luz salieron los dos pequeños de la persona. Ellos estaban vestidos con brillantes azules, monos y cascos de burbuja de aire tipo. Tenía sólo siete años, pero que no fueron tan altos como él. Su perro fiel no emitió ningún sonido, cuando dos seres se tomaron riley, de la mano, y le llevaron a la nave. Cuando dio un paso justo debajo del platillo, apareció la cegadora luz blanca, y lo siguiente que supo: que estaban a bordo. Él estaba desnudo en una mesa similar a la de operaciones de la mesa.
Cuando la gente pequeña, por primera vez se acercaron a él en el río, él al instante tuvo miedo. Después de haber entrado en el barco, dos pequeños extranjero quitaron los cascos, y ahora podía ver claramente su cinturón.
El hombre era de unos cuatro pies de altura, y la mujer era unos centímetros más abajo. En realidad, la apariencia de los hombres y las mujeres se distinguía sólo algunas de las características. La cabeza se registraron más de lo habitual, en proporción al cuerpo. Los ojos eran grandes, немигающими овалами. Los ojos de los hombres eran de la luz de la profunda hasta que un color dorado, y los ojos de la mujer estaban azules. Sombras de sus ojos tenían la tendencia de cambiar la profundidad, en función de la luz y, posiblemente, de las emociones. Con manos eran largas, las puntas de los dedos llegaban casi hasta las rodillas. Sus piernas se veían planos y extendidos a cabo. Sus manos eran largas y finas, y sólo tenían tres dedos y el pulgar. El dedo índice ha sido más larga de la media. No tenían externos de oído, pero había pequeños agujeros en los lugares donde deben ser oídos. El de la nariz no es el cartílago, y él era casi plana con respecto a su perfil. De la boca con los labios delgados y era similar a la de la ranura en la cara. Los dientes eran pequeños y homogéneos, como los dientes de leche.Подбородки eran afilados y salieron, dándole a la forma de los huevos. El tono de la piel de la mujer era de un color gris-blanco, el color de la cara de los hombres era de color amarillento-marrón o dorado. El color de la piel también ha variado en el tiempo, no principalmente por el color, y en sutiles tonos.
Ellos no pronunciaban la palabra, y se comunicaban a través de la telepatía. Estaban allí y otra de fondo. Riley dijo Стагианцы ("Stagyians"). Él podía ver y sentir sus largos y delgados brazos. Su tacto era frío. Él no podía mover mi cuerpo, pero podía mover los ojos y la cabeza con fuerza.
Стагианцы realmente eran muy feas criaturas. Ellos fueron el aumento de casi seis pies de altura y tenían oscuro-rojo cuero de la piel, libremente накинутую en скелетоподобные de la estructura. Sus cabezas eran largas y сморщенными, y los ojos pequeños, negros y cerca datan de. Incluso a bordo de la nave que ambos llevaban algún respiratoria dispositivo en sus bocas, y a veces él podía oír a su rápida respiración superficial.
Más tarde se enteró de que стагианцы, a pesar de su apariencia, se consideraban пацифистами incluso entre los extraterrestres debido a su capacidad de almacenar una gran cantidad de datos, así como recordar y difundir. Стагианцы ocupan un montón de científicos y otros intelectuales de posiciones entre la federación биавианцев, con el que están asociados.
Стагианцы también se comunicaban a través de la telepatía. Sin embargo, riley no podía entender lo que decían. Durante el examen médico, que se referían a él con la cabeza a los pies, escaneó con la ayuda de algún tipo de luz de la sonda, recuerda ojo gigante.
Riley fue finalmente devuelto a la orilla del río cerca de su casa después de un largo viaje a bordo de la nave биавианцев.
Traducido del servicio de «Yandex.Traductor»
Noticias originales
Seven-year old Riley Martin first saw strange lights above the river near his home. At the time his family lived near the western bank of the Saint Francis River, which is one of the tributaries that feed into the Mississippi. The lights that appeared above the river for three nights straight at around the same time in the late night or early morning, coming closer with each successive visitation, on the third night the brilliant lights were close enough to his house to cast the glow of their presence onto the walls of his bedroom. It was on the third night that Riley decided to go out and investigate. Strangely his two brothers, who shared the room with him, never awakened to witness the lights. Even when he tried to awake them. He was never successful. Perhaps this was by design, because ordinarily, he would not have been awake at that hour of the morning. There were four of the lights, and he had watched them, fascinated by their acrobatic displays. They would shoot across the river from the west and come to an immediate standstill above the river. Then slowly they would circle in a follow-the-leader manner. Or the fourth one would remain stationary while the smaller three circled it. After a time, the fourth light would disengage itself from its companions and descend, glowing ever larger, toward the treetops near the river. He could not detect any sound.
The lights would often change in color and intensity from yellow to white, to red, green and shades of blue. On the third night the lights were very close, and it seemed to land behind the trees less than a quarter mile from his home. He put on his jacket and went out. He was accompanied by his faithful and fearless mixed breed dog, Brown Boy. They soon approached the spot where the ship had landed. Peeking through the bushes, he saw a saucer, it stood in a clearing suspended about twelve feet above the ground, and though it was moored by three flexible legs, it slowly danced about, like a cork bobbing on water.
Shortly the ship pulsed pinkish, and Riley found himself focused in a light beam emanating from the ship. Out of the light strode two little people. They were dressed in shiny blue jump suits and wore bubble type helmets. He was only seven but they were hardly as tall as he. His faithful dog, Brown Boy, didn’t make a sound of protest as the two beings took him by the arms and led him toward the ship. When he stepped directly beneath the saucer, there was a blinding white light, and the next thing he knew they were aboard. He found himself lying nude on some kind of table similar to an operating table.
When the little people first approached him on the river he was momentarily terrified. After they entered the craft, the two small aliens had removed their helmets and he could now see them clearly from the waist up. The male was about four feet tall and the female was a few inches shorter. In actual appearance, male and female differed just slightly in features. The heads were noticeably larger than normal in proportion to the body. The eyes were large, unblinking ovals. The male’s eyes were a light to deep gold color, while the female’s eyes were blue. The shades of their eyes tended to change depths, depending upon the light and perhaps the emotion. Their arms were long, the fingertips reaching almost to their knees. Their feet looked flat and kind of splayed. Their hands were long and delicate and had only three fingers and a thumb. The forefinger was longer than the middle finger. They had no outward earflaps, but tiny holes where the ears should be. The nose had no cartilage and was almost flat against the profile. The mouth was thin-lipped and looked like a slit on the face. The teeth were tiny and uniform, like baby teeth. The chins were sharp and receding and gave the face an egg-like shape. The female’s skin tone was gray white, and the male’s complexion was yellowish brown or golden. The skin colors also changed at times, not in basic color but in subtle tones.
They did not articulate with their mouths but communicated via telepathy. Riley reported that the actual examination was left to a group of entities he called “Stagyians”. He could see and feel their long spindly hands. Their touch was cold and clinical. He could not move his body, but he could move his eyes and head with effort. The Stagyians were very ugly creatures indeed. They stood nearly six feet tall and have dark red leather skin draped loosely over their skeletal like frames. Their heads were long and prune-like and the eyes tiny black and close set. Even onboard the craft they both wore some kind of breathing device over their mouths and at times he could hear their rapid shallow breathing. He was later to learn that the Stagyians in spite of their physical appearance were considered to be the Pacifists even among the aliens because of their ability to store and retain vast amounts of data and recall and disseminate the same. The Stagyians hold many scientific and other brainy positions among the Biaviians federation, with whom they are affiliated. The Stagyians also communicated via telepathy. However, Riley could never comprehend any of what they were saying. During his physical examination he was touched from head to foot, scanned with some kind of light probe that resembled a giant eye. Riley was eventually returned to the banks of the river by his home, after a long trip onboard the Biaviians ship.
Hipótesis
Investigación
Currículum
Inicie sesión o regístrese para comentar
