Ameonna

Ame-Onna (Yap. 雨女, mujer de la lluvia) - en la mitología japonesa, el espíritu de la lluvia en la imagen de una mujer mojada, lamiendo gotas de humedad de sí misma. Roba bebés y les chupa el alma.

Originalmente era una Deidad antigua de las creencias populares de Japón y China, donde las lluvias enviaban buenos dioses y diosas que vivían en las nubes por la mañana y descendían por la noche, viajando eternamente entre el cielo y la tierra, pero, según las creencias, algunos de ellos se habían corrompido y se habían convertido gradualmente en youkai malvados.

Aparece en días lluviosos y noches, ya que provoca lluvia en todas partes. Aunque trae consigo la lluvia y puede salvar de la sequía, o incluso enriquecer a algún campesino, no se considera un buen espíritu.

Si logra encontrar al niño que nació esa noche, lo secuestra y lo lleva a la oscuridad, donde bebe su alma y lo convierte en otro ame-Onna.​ También se convierten en madres que de esta manera han perdido a sus hijos (habiendo perdido la mente, estas mujeres transformadas deambulan por las calles nocturnas con grandes bolsas en sus manos con la esperanza de reemplazar lo que les robaron cuando aún eran humanos).

En la visión moderna, los japoneses consideran que "ame-Onna" (o "ame-Otoko", su equivalente masculino) es un hombre desafortunado que parece haber sido maleducado, ya que la lluvia lo sigue donde quiera que vaya, por lo que adquiere la reputación de "hombre de la lluvia", cuya invitación, debido a la lluvia que lo acompaña, promete interrumpir eventos callejeros como bodas o deportes.