Terrashot de montaña fúnebre

Una criatura del folclore de los inmigrantes americanos. Tiene un cuerpo en forma de ataúd de seis a ocho pies de largo, un caparazón a lo largo de toda la espalda y cuatro patas largas y temblorosas. Debido a esto, el terrashot al caminar gira impredeciblemente de lado a lado y de adelante a atrás.

Esta increíble bestia fue narrada por primera vez por los emigrantes mormones, que observaron una extraña procesión que descendía al desierto desde una cresta de montaña, más tarde llamada las montañas Funerarias. También fueron testigos de la trágica muerte de todos los animales.

El animal vive en prados de alta montaña y en los bosques de la cordillera, donde su población aumenta gradualmente hasta que, por un extraño impulso, los terrashots de repente abrazan la sed de cambiar de lugar. Luego forman largas procesiones y descienden al desierto con la aparente intención de llegar a otras crestas visibles desde una distancia lejana. Al llegar a las arenas calientes, se hinchan rápidamente con el calor y explotan uno por uno con un fuerte aplauso, dejando profundos pozos en forma de tumbas en la arena.